Hoy te voy a hablar de algunos alimentos (procesados todos ellos) que parecen o se venden como sanos pero no lo son.
Palabras o expresiones como; “artesano”, “100% natural”, “fuente de hierro”, “rico en vitaminas”, “sin azúcares añadidos”, “light”, “bajo en grasa” son las herramientas que el marketing utiliza para atraer la atención y la confianza del consumidor hacia unos productos que se venden como sanos pero que están a miles de kilómetros de la salud.
A continuación te voy a dar un listado de productos que, a mi modo de entender la alimentación, no son saludables por mucho que se grite que se lo son:
Zumos comerciales:
Les añadan o no, los zumos aportan una gran cantidad de azúcar. En un vaso de zumo de naranja, por ejemplo, puedes encontrar el contenido de tres o cuatro naranjas. No aporta fibra y no sacia como lo haría una pieza de fruta. ¿Quién se come seis naranjas de una sentada?, en cambio, ¿quién no se ha tomado dos vasos de zumo alguna vez? Esa avalancha de azúcar al torrente sanguíneo de manera constante y habitual, tiene consecuencias muy negativas para la salud.
Ampliar noticia: http://blogs.diariovasco.com/nutricion-cocina-saludable/2015/05/12/oro-parece-pero-no-lo-es/